Hola chicos, ¿qué tal va ese agosto? Para los que estáis de vacaciones seguro que fenomenal. Y para los que no pues… ¡ánimo! Hoy os quiero contar mi experiencia Coolsculpting. Un tratamiento que promete ser la alternativa a la liposucción sin pasar por el quirófano.
Seguramente os habréis echado las manos a la cabeza. “¿Por qué Arturo con lo delgado que está prueba esto?”. Os lo explico. Soy un chico delgado (bueno, ahora pelín atlético, o eso creo yo). Y, de toda la vida, acumulo grasa en el abdomen. Sobre todo, desde que cumplí 30 años. Los cuerpos ya no son lo que eran. Así que me decidí a probar Coolsculpting en el abdomen y contaros mi experiencia. Todos tenemos un punto débil y el mío es la barriga.